“NOTICIAS DEL CHOCÓ” 1988-1989
Además del disgusto que produjo en los productores de «Nuevo Chocó» el reclamo de Carlos Arturo Córdoba Romaña sobre la paternidad de la idea y del título del periódico, se sumó cierta desavenencia entre el director, Falconery Ruíz Cano y el gerente Alberto Rivera Marín.
Como hemos dicho, Carlos Arturo Córdoba se quedó con «Nuevo Chocó”, Falconery Ruíz partió para Pereira y Alberto Rivera Marín, acolitado por Jorge Salgado Vélez y José E. Mosquera Berrio, se dio a la tarea de cranear su propio órgano informativo, al que finalmente decidieron bautizar con el sencillo nombre de «Noticias del Chocó». Apareció al mes siguiente del rompimiento de que hemos hablado, o sea en agosto de 1988.
Al comenzar la página tercera, en recuadro destacado, apareció el primer editorial titulado «Saludo de Presentación»:
Amable lector:
«Tiene Ud. en sus manos la primera edición del periódico NOTICIAS DEL CHOCÓ».
«Sabemos que elaborar un periódico regional es una labor titánica. Amén de las restricciones de tipo económico, deficiencias de publicidad, tenemos en el Chocó problemas de energía, de teléfonos, de transporte, etc., que dificultan la producción de un medio escrito constante».
«Desde los días de la Independencia de Colombia hasta hoy, han visto la luz en el Chocó unos 70 periódicos, la mayoría de fugaz vida y muerte prematura. Las únicas excepciones han sido «A.B.C.», de Reinaldo Valencia que perduró entre 1913 y 1944, y «Presente» del presbítero Efraín Gaitán, que contra viento y marea viene publicándose desde 1967.
«No es el objetivo de «Noticias del Chocó» la ganancia de dinero, ni tampoco la recopilación y transcripción de un sartal de invectivas generalizadas».
«Noticias del Chocó» hará todo esfuerzo por completar la información con abundante material gráfico y una moderna diagramación. Buscaremos mejorar en cada edición y presentar crónicas producto de buenas investigaciones. Nos gusta lo serio y repudiamos lo superficial».
«No es «Noticias del Chocó» un vocero grupista. Como colaboradores tenemos personas de ala prestancia intelectual y de diversas escuelas del pensamiento. Estamos del lado de la democracia y rechazamos todo tipo de violencia. Y, por último, por encima de todo, defenderemos el derecho a una vida mejor del pueblo chocoano».
El tamaño adoptado por «Noticias del Chocó» fue de 35 x 28, primera y última página a todo color, impresión a cargo de una editorial de Medelln,16páginas, profusión de fotografías, abundantes y bien traídas noticias, caricaturas de impacto a veces a todo color, entrevistas bien logradas a personajes de actualidad en diferentes campos. En una palabra, excelente publicación, una de la mejores que ha tenido el Chocó. En la bandera, además del director, figuraban algunos de sus colaboradores, como Carlos Arturo Caicedo Licona, Enrique Rentería, Gustavo Trujillo Rumié, Jorge Iván Salgado Vélez. Reporteros: Jacinto Mosquera Agualimpia y Eudes Benicio Asprilla.
Como novedad, «Noticias del Chocó» introdujo la costumbre de colocar encima del nombre del periódico, en forma destacada, el mes de su aparición.
En la edición de diciembre, el título del editorial fue: «Llegamos a la cuarta edición»: «Sorteando dificultades, salvando obstáculos de toda índole, hemos penetrado con «Noticias del Chocó» en el ámbito departamental, gracias obviamente a nuestros anunciadores, quienes han tenido fe en la meta impuesta de mantener informados a los lectores chocoanos y no chocoanos sobre la problemática del departamento.
En la misma página editorial transcribían el mensaje enviado por el obispo de Quibdó Monseñor Jorge Iván Castaño Rubio: «cordial saludo, auguro éxitos al periódico que usted dirige y anhelo conserve la ética periodística, para que continúe siendo fiel a la verdad».
Todo marchaba bien. Sólo que no apareció ni en enero ni en febrero de 1989. En marzo salió el número 5. Al lado derecho de la primera plana destaca-ron este titular junto con una foto de cuerpo entero y a todo color del director del periódico, Alberto Rivera Marín: NOTICIAS DEL CHOCO adquiere vida jurídica: “El 10 de enero de 1989 la Secretaria General del Ministerio de Gobierno firmó la resolución número 0036 por medio de la cual se reserva el nombre «Noticias del Chocó» como distintivo de una publicación periódica mensual a favor de Alberto Rivera Marin.Con este hecho, el periódico «Noticias del Chocó” ad-quiere categoría y claridad legal, a la par de los avances tenidos en circulación y el apoyo del pueblo chocoano».
«A pesar de sus escasos medios de vida, recibimos de todos los lectores de la opinión chocoana mensajes de respaldo y felicitación».
«Las dos primeras ediciones tuvieron una circulación de 1.000 ejempla-res, las dos siguientes de 2.000 y para 1989 es nuestra meta subir a 5.000ejemplares. Con todo ello aumentará la influencia del periódico y, así lo esperamos, el respaldo publicitario que cubra los altos costos de producción».
¡Licencia del Ministerio de Gobierno!; Felicitaciones a granel! j5.000ejemplares! viento en popa! Nada presagiaba que sus días estaban contados y que la muerte lo estaba cercando.
Sucedió que el ex -gobernador del Chocó, Arturo Ferrer Carrasco fue nombrado por el Presidente de la República gerente del Banco Central Hipotecario que equivale en importancia a un instituto descentralizado. Repasando Ferrer Carrasco la lista de sus amigos que más confianza le inspiraban, tropezó con el nombre de Rivera Marín, chocoano como él y su secretario de gobierno cuando fue gobernador del Chocó. Le ofreció las comodidades propias de la capital de la República, buen sueldo y perspectivas de ascenso. Con estos señuelos a la vista, ¿quién no abandona las incomodidades de una capital de provincia y los inconvenientes del periodismo regional? Para no caer en la tentación se necesitaría estar dotado de una gran vocación por el periodismo y de denodado espíritu de sacrificio por el pueblo, vocación y espíritu de los que dio muestras Alberto Rivera Marín no poseer por el momento.
Así, pues, el Chocó perdió un importante y promisorio órgano de difusión y el Estado ganó un nuevo burócrata.
Tomado: Rastros y Rostros del Periodismo Chocoano de Efraín Gaitán Orjuela,2004